El sector lácteo español vivirá en 2020 un importante crecimiento en la demanda de las industrias transformadoras. Inleit -nueva creación- y las ampliaciones de Entrepinares y Nestlé demandarán a lo largo de los próximos meses casi 700.000 toneladas más de leche al año.

Junto a las ampliaciones y nuevos crecimientos registrados por estas compañías también cabe destacar la adquisición por parte de Capsa -Central lechera Asturiana- del 50% de la quesera castellana “La Flor de Burgos” que de la mano de la empresa asturiana prevé continuar con su proceso de crecimiento y consolidación desarrollado durante los últimos años.

Estos datos confirman que el futuro del sector lácteo español se consolida en un escenario deficitario puesto que además del incremento en el consumo interior la transformadora Inleit prevé exportar la práctica totalidad de su producción, sacando así del mercado nacional casi 400.000 toneladas de leche española al año.

Teniendo en cuenta las fuertes subidas del precio de la leche registrada en el resto de países europeos, EEUU y la ausencia de excedentes en la UE y en países referentes como Nueva Zelanda hacen previsible que la demanda a los ganaderos españoles crezca a lo largo de este año 2020.

La tendencia de la leche en polvo también es al alza y pone de manifiesto que los movimientos previstos por el mercado para los próximos años no hacen sino confirmar una tendencia prevista desde el año pasado a nivel mundial.

A estas realidades -confirmadas por las fuertes inversiones y el crecimiento de las mayores multinacionales del sector- se suma la previsión de aumento del consumo en el gigante chino que puede, una vez más, determinar el sentido del mercado lácteo a nivel mundial.

Todo ello deben de ser buenas noticias para los ganaderos españoles que siguiendo la ley de la oferta y la demanda previsiblemente obtendrán mejores precios por un producto cada vez más demandado y con precios aquí todavía mucho más bajos que los de sus competidores más directos.