OBSERVATORIO Septiembre: Por detrás de Europa

Se sabía que iba a llegar y los datos del mes de julio lo han confirmado. Europa vuelve a tener precios de la leche cruda superiores a los pagados en territorio español. 

En el mes de julio en Europa se pagaron 46,82 €/100 Kg. Mientras que en nuestro país la cifra se redujo hasta los 45,92 €/100 Kg. El diferencial inviable por los costes logísticos para las importaciones de leche cruda ya se superó hace meses pero todavía había que soportar la presión de productos foráneos derivado de la existencia de quesos de bajo coste procedentes de Alemania y Holanda que seguían inundando nuestro mercado. Por otro lado, también es importante recordar que nuestro país, independientemente del precio en el resto de Europa, necesita importar el 25% de los productos lácteos que se consumen en el mercado interno porque seguimos siendo un estado deficitario. 

La cifra de 47,3 €/100 litros pagados en julio por la leche en nuestro país debería, por tanto, ser la última de la serie de bajadas que se registran en nuestras explotaciones desde el mes de noviembre del año pasado cuando la leche se pagó a 5,22 €/100 Kg. La disculpa del diferencial con el resto de Europa ya no tiene sentido. 

La revalorización de las materias primas -encabezada por la mantequilla- también está en máximos históricos en el resto de Europa por lo que es de esperar que los fabricantes de queso centroeuropeos dejen de producir el queso barato que tanto nos ha afectado durante el último año. 

Las entregas en España, mientras tanto continúan con su tendencia alcista pese a la bajada de precios. Así durante el mes de julio de 2024 se produjeron 628.264 toneladas de leche cruda, es decir, un 1,2% que en el mismo mes del año pasado. Más allá de lo favorable de las condiciones climatológicas para la producción láctea en el inicio de este verano, nuestro país sigue dando muestras de su capacidad para producir más con menos vacas y con menos ganaderos.

Las estadísticas que reflejan el precio medio de la leche demuestran la tendencia bajista de los precios en nuestro país donde también se registran bajadas en los costes de alimentación soportados por los ganaderos. Así el precio Pienso Complementario para el mes de agosto se estimaba en el mes de agosto en 256,08 €/Tn frente a los 257,59 €/Tn del mes anterior. El descenso intermensual se sitúa en el 0,6% para alcanzar en el interanual una bajada del 14,9%. 

Estas cifras influyen, desde luego, en el amortiguamiento del fuerte descenso del precio final de la leche en las explotaciones. El mercado, sin embargo, debiera comenzar a tener en cuenta las importantes incrementos en los costes de producción que desde hace relativamente poco tiempo comienzan a tener partidas relativas a las nuevas exigencias ambientales, de sanidad animal y de carácter laboral que han hecho descender sin duda el tradicional 60% del coste total que se atribuía a la alimentación de los animales. 

La difícil situación que atraviesa el sector se ve de forma explícita en el descenso del número de explotaciones que permanecen en activo en nuestro país y que han vuelto a descender en el mes de julio hasta las 9.611, 73 menos que hace sólo un mes. En el acumulado del año 2024, el número de explotaciones se ha visto mermado en 346. Eso quiere decir que el ritmo de cierres se mantiene en la dramática cifra de dos granjas menos al día. 

Una visión global del sector en España demuestra, por otro lado, que en España se han cerrado desde el año 2015 más de 8.000 explotaciones pero que, sin embargo, cada vez somos capaces de producir más toneladas de leche. Cantidad que, pese a todo, sigue siendo insuficiente para satisfacer la demanda de productos lácteos en nuestro mercado interior. Un mercado en el que se están produciendo cambios importantes de consumo con descensos para la leche líquida y aumentos en otros productos como el queso o la mantequilla. 

Fuente: AGAPROL